Harlem recibe a su nuevo espacio para el arte afroamericano
Nacido en 1968, el Studio Museum de Nueva York, una institución emblemática de la creación afroamericana en una época en que aún no era reconocida por los museos del país, reabre sus puertas este fin de semana en Harlem, en un edificio completamente nuevo.
Ubicado en el corazón de este barrio, cuna de la cultura negra de la ciudad, el nuevo museo se extiende sobre 7.600 metros cuadrados y se eleva a lo largo de siete pisos, con vistas impresionantes de Manhattan.
Inicialmente instalado en un loft situado sobre una tienda de licores, el Studio Museum se trasladó en 1981 a su ubicación actual, que entonces era un antiguo banco.
Tras siete años de obras, el edificio original fue completamente demolido para dar paso al proyecto.
Este nuevo espacio albergará una importante colección permanente de unas 9.000 obras realizadas por cerca de 800 artistas.
Como guiño a su pasado, el museo inaugura con una retrospectiva de Tom Lloyd, pionero de la programación electrónica en el arte con sus esculturas luminosas, algunas de las cuales fueron expuestas en la inauguración del museo en 1968.
En aquella época, las obras realizadas por artistas de la comunidad afroamericana estaban prácticamente ausentes de los museos del país.
Hoy, artistas como Rashid Johnson, Amy Sherald y otros son exhibidos regularmente en museos neoyorquinos como el Guggenheim o el Whitney.
La escultora Elizabeth Catlett acaba de ser objeto de una retrospectiva en el Brooklyn Museum.
- 300 millones de dólares invertidos -
Desde los inicios de la institución "hemos sido testigos de esta trayectoria increíble, que resulta en parte del trabajo realizado por el museo en su creación y en sus primeros años", estima Thelma Golden, directora del Studio Museum.
Sin embargo, "estamos convencidos de que queda mucho trabajo por hacer", explica quien supervisó una recaudación de fondos de 300 millones de dólares para las obras.
La historia de la institución se relata a través de fotos de la colocación de la piedra fundamental en 1968, carteles de noches de jazz o exposiciones como la retrospectiva de James Van Der Zee, célebre fotógrafo del Renacimiento de Harlem, movimiento cultural negro de entreguerras.
En su creación, el Studio tenía la ambición de presentar todo lo que representara "un trabajo verdaderamente contemporáneo" que podría ser "un destello fugaz o, por el contrario, inaugurar una nueva escuela o una nueva orientación artística".
Sus creadores también buscaban redefinir el barrio de Harlem, "demasiado a menudo asociado con los barrios marginales y la violencia", y "hacer de Nueva York una ciudad unida, en lugar de una ciudad dividida por un muro de Berlín invisible".
Un giro importante fue la decisión en el año 2000 de abrir el museo a todos los artistas de ascendencia africana, y no solo a aquellos de origen estadounidense.
- Hormigón y vidrio -
Esta ambición ampliada se refleja claramente en la fachada, flanqueada por la famosa bandera del artista David Hammons, "African-American Flag", que combina los colores de la bandera panafricana (rojo, negro, verde) con la estadounidense (estrellas, rayas).
Otra obra emblemática: "The Joyful Mysteries", de Houston Conwill, unas cápsulas de bronce que contienen declaraciones "testamentarias" de siete figuras afroamericanas, incluida la premio Nobel de Literatura Toni Morrison. Serán abiertas en septiembre de 2034, cincuenta años después de su creación.
El nuevo edificio, un conjunto de formas geométricas de hormigón gris y vidrio, contrasta por su arquitectura y materiales con el barrio, pero se integra armoniosamente gracias a su tamaño pensado.
Thelma Golden lo describe como un lugar que busca "redefinir lo que un museo puede ser, tanto en su espacio como en su contenido".
Rinde homenaje a sus predecesores, algunos de los cuales no vivieron lo suficiente para ver el arte negro plenamente reconocido.
"Soy muy consciente de que no pudieron ver los frutos de su trabajo", confiesa a la AFP. "El legado que me transmiten es que su convicción original ha perdurado en el tiempo".
P. Gomes--JDB