
Los viticultores del famoso espumante italiano de Asti recortan su producción por vaivenes del mercado

La vendimia termina y las hojas comienzan a amarillear en la famosa región productora de vinos espumantes de Asti, en Italia. Este año quedarán uvas en las viñas porque los viticultores decidieron producir menos ante la caída de las ventas en Rusia y Estados Unidos.
Tras dos años complicados, se espera que Italia se posicione en 2025 como el primer productor mundial de vino, por delante de Francia, según las estimaciones publicadas a principios de septiembre por los viticultores.
Pero "es una medalla de chocolate", lamenta el secretario general de la Unión Italiana de Vinos, Paolo Castelletti. "El consumo de vino está bajando, sobre todo en nuestro principal mercado de exportación, Estados Unidos".
Sin contar los aranceles estadounidenses, que hacen que las exportaciones sean menos rentables y podrían llevar los vinos italianos por encima de la "barrera psicológica" de los 20 dólares por botella, según Castelletti.
Los vinos de Asti también son particularmente apreciados en Rusia, pero la demanda disminuyó desde el inicio de la guerra contra Ucrania. En este mercado se vendieron unas 17 millones de botellas en 2023, luego bajó a 12 millones en 2024, y el objetivo para 2025 es mantenerse a flote con 10 millones.
En total la demanda de exportación de vinos italianos se ralentizó 4% en los primeros cinco meses de 2025.
Se trata entonces de apostar cada vez más por la calidad en lugar de la cantidad, según Castelletti.
Mientras algunos viñedos en Francia decidieron arrancar vides - y la Comisión Europea respalda esta práctica-, la Unión Italiana de Vinos aboga por una producción que se adapte a las fluctuaciones del mercado, "en acordeón".
Alrededor de Asti, en el Piamonte, los viticultores decidieron producir menos vino espumante este año, pasando de 10 a 9 toneladas de moscatel blanco por cada hectárea de viña.
- "Selección natural" -
En su finca la Ca' dei Mandorli (Casa de los almendros), Stefano Ricagno analiza sus primeros mostos con un enólogo francés, mientras que vendimiadores indios dan los últimos cortes de tijera en las viñas.
Las vendimias nunca terminaron tan pronto, constata el viticultor. "Pensábamos producir mucho, pero hizo muchísimo calor. La cosecha de moscatel está casi en línea con nuestros objetivos (reducidos)", explica.
Ricagno, de 46 años, es la sexta generación de una familia de viticultores y ahora preside la organización para la denominación de origen controlada "Asti", que cubre cerca de 10.000 hectáreas de colinas inscritas en el patrimonio mundial de la Unesco.
La región es conocida por sus espumantes dorados de bajo contenido alcohólico, generalmente alrededor de 7% para el "Asti" y de 5% para el "Moscato", cuya producción se vende casi en su totalidad a Estados Unidos.
Las ventas de la denominación "Asti", que fueron de 100 millones de botellas en 2023 y 90 millones en 2024, deberían caer a 85 millones en 2025, y los viticultores ven como crecen sus existencias.
"Veremos en 2026 si las guerras terminan y los mercados se recuperan", comenta Ricagno.
Otras denominaciones italianas, como la Valpolicella en el Véneto, también redujeron los volúmenes este año ante la incertidumbre del mercado.
Algunos viticultores no quieren oír hablar de cuotas ni de denominaciones.
A pocos kilómetros de Asti, en Nizza Monferrato, Francesco Pozzobon, de 35 años, recuperó viñedos abandonados que cultiva sin productos fitosanitarios, sembrando tréboles y habas entre las hileras.
"Hemos producido demasiado y mal. Con la caída de la demanda habrá una selección natural", subraya.
Y aunque el rendimiento de su Tenuta Foresto es mucho más irregular y bajo que el de sus vecinos — tres toneladas por hectárea— vende sus vinos "artesanales" a buen precio y llega incluso hasta el mercado chino.
Para recuperarse, la denominación Asti quiere que sus burbujas conquisten el momento del aperitivo, ya que en Italia están relegadas al postre, y se aproveche el nuevo gusto de los clientes por vinos con menor graduación alcohólica, precisa Ricagno.
D. Barbosa--JDB