
En la isla escocesa de la madre de Trump, poca simpatía por el presidente estadounidense

Donald Trump, que anunció la semana pasada un acuerdo comercial con Reino Unido, tiene raíces en la isla de Lewis, noroeste de Escocia, donde su madre vivió hasta los 18 años, pero sus habitantes expresan muy poca simpatía hacia el presidente estadounidense.
La casa es extremadamente simple, a unos 200 metros del mar, rodeada de paisajes austeros y barridos por los vientos del Atlántico.
Allí, en el pequeño pueblo de Tong, creció Mary Anne MacLeod, la madre de Donald Trump, nacida en 1912.
El ahora presidente estadounidense pasó brevemente por Tong en 2008, el tiempo suficiente para tomar una foto y encontrarse con algunos primos.
Difícil imaginar algo más diferente en comparación con su lujosa residencia de Mar-a-Lago, en Florida, o la Trump Tower en Nueva York.
Si su predecesor Joe Biden no perdía nunca la oportunidad de recordar sus raíces irlandesas, Donald Trump habla menos sobre sus orígenes escoceses.
Sin embargo, posee dos campos de golf en Escocia, y se espera la apertura de un tercero.
En 2018, Theresa May, entonces primera ministra británica, le regaló el árbol genealógico de sus ancestros escoceses.
"Es bueno estar en casa, este era el hogar de mi madre", dijo también Trump al aterrizar en 2023 en Aberdeen, en el noreste de Escocia, para una visita a sus campos de golf.
Al anunciar el jueves el acuerdo comercial con el gobierno británico, Donald Trump también afirmó que las relaciones entre Estados Unidos y el Reino Unido son "más fuertes que nunca".
Pero en la isla de Lewis, donde los habitantes suelen ser acogedores y habladores, basta con pronunciar el nombre de Donald Trump para que se imponga el silencio, como si nadie quisiera hablar sobre él.
- Sentimiento de vergüenza -
"¿Vio usted la pancarta? Es lo que piensa la mayoría de la gente, pero no quieren hablar de algo controvertido", explica una habitante de Tong, prefiriendo mantener el anonimato.
La pancarta en cuestión está colgada en un comercio cerca del puerto de Stornoway, la ciudad más grande de la isla.
"Shame on you, Donald John! #democracy" (¡Qué vergüenza, Donald John! #democracia"), dice la pancarta con grandes letras negras.
Sarah Venus, la propietaria del comercio, que se declara estadounidense y escocesa, afirma haber recibido "un apoyo masivo" por parte de los locales y de turistas norteamericanos.
Según ella, no hace falta añadir el apellido Trump en la pancarta. Todos saben a quién va dirigida, aunque Donald John sea un nombre extremadamente común en la isla, que cuenta con menos de 20.000 habitantes.
El apellido de su madre, MacLeod, también es el más frecuente en Lewis.
Sarah Venus critica la política antinmigración del presidente estadounidense, dado que la madre de Trump "fue también una inmigrante".
Para saber más sobre Mary Anne MacLeod, hay que acudir a Bill Lawson, una celebridad en la isla debido a su trabajo titánico durante décadas elaborando los árboles genealógicos de los habitantes.
La madre de Trump, cuenta Lawson, tenía varios hermanos y hermanas, "probablemente ocho" y ella era una de las mayores de la familia, explica el hombre, memoria viva de la isla a sus 87 años.
El padre de Mary Anne MacLeod, abuelo de Donald Trump, era pescador y pequeño agricultor. "En aquella época, se vivía de lo que había disponible, de la tierra y, si el clima lo permitía y se disponía de un barco adecuado, se pescaba", explica Bill Lawson.
Pero a principios de la década de 1920, la isla de Lewis experimentó una emigración masiva. La población había crecido y ya no había suficientes recursos para todos.
"La emigración fue tan significativa que las compañías navieras enviaban barcos a Stornoway y partían llenos de migrantes" hacia Canadá y el este de Estados Unidos, relata Bill Lawson.
Mary Anne MacLeod dejó el puerto de Stornoway en 1930 para reunirse con su hermana en Nueva York. Allí conoció al promotor inmobiliario Fred C. Trump, con quien se casó en 1936, experimentando un ascenso social fulgurante.
Los habitantes de Lewis prefieren hablar de Mary Anne MacLeod antes que de Donald Trump, y cuentan que ella regresó regularmente a la isla hasta su muerte en el año 2000.
Una hermana del presidente estadounidense se ganó el aprecio de los lugareños al donar una suma importante a una residencia de ancianos.
Donald Trump, por su parte, es "un extraño" para la isla de Lewis, concluye Bill Lawson.
M. dos Santos--JDB